Enrique de Dinamarca ha fallecido en la noche de ayer martes, día 13 de febrero de 2018, a los 83 años de edad, en el castillo de Fredensborg, residencia oficial situada a unos 40 kilómetros al norte de la capital danesa, donde había sido trasladado horas antes desde el Hospital de Copenhague, acompañado de toda su familia.
Enrique de Dinamarca, hijo del conde André de Laborde de Monpezat y Renee Doursenot, pasó su infancia en la Indochina francesa, estudió Derecho y Ciencias Políticas en la Sorbona. De espíritu aventurero le llevó a instalarse largas temporadas en China y Vietnam, donde estudió lenguas orientales, para luego empreder la carrera diplomática.
Se casó con Margarita de Dinamarca el 10 de junio de 1967. Tuvieron dos hijos, Federico, heredero al trono y Joaquín.
La capilla ardiente se instalará el próximo viernes en la iglesia de Christiansborg, y sus exequias se celebrarán el proximo martes, de forma privada por deseo expreso del propio príncipe, quien no quiso que su muerte se convirtiera en un asunto de Estado.