Clarence Bright, qua así se llamaba el fallecido, fue encontrado dentro de un congelador en el sótano de la casa de su hijo. Éste, le metió en el frigorífico para intentar traerle de vuelta a la vida. El hombre, de 38 años, fue arrestado después de que la policía encontrara el ataúd vacío en el interior de su furgoneta.
El hijo, un hombre de 38 años procedente de Detroit, en Estados Unidos, robó el cuerpo de su padre del cementerio con la esperanza de resucitarle a través de una oración. Robó su ataúd de un mausoleo en el Cementerio Gethsemane. Varios testigos dijeron haber visto una camioneta blanca detenida durante un tiempo en el cementerio.
Poco después, la policía encontró el vehículo estacionado en una gasolinera con el ataúd vacío en su interior. Dos hombres fueron detenidos, uno de ellos el hijo del difunto y otra persona cuya identidad no ha sido revelada. Ambos están bajo custodia policial, con cargos y aún no han sido puestos en libertad.
El hijo explicó a los miembros de la familia que se llevó a su padre del cementerio con el fin de traerlo de vuelta a la vida. El funeral había sido apenas cuatro días antes, pero no fue enterrado ya que, debido a las lluvias, el suelo estaba muy mojado.