Es el cementerio más extravagante y más raro nunca visto. Se encuentra en el fondo del Océano Atlántico, delante de las costas de Florida, concretamente Miami, y según sus descubridores guarda cierto parecido con la legendaria cuidad desaparecida, la Atlántida.
El nombre por el que es conocido es El Arrecife Conmemorativo Neptuno. Se trata de una creación del diseño y de la ingeniería, tanto se parece que quien lo visita creé estar pasando por unas ruinas arqueológicas .
Una Atlántida para los muertos
Dentro de ella parecerá que allí se encontraba una poderosa civilización. Existen arcos, pasajes, glorietas y calles, todo ello como si llevara toda la vida ahí, a pesar de que existe desde hace tan solo 2 años. Las lápidas que existen solo tienen forma de conchas marinas y los sepulcros tienen apariencia de columnas dóricas. Allí puedes encontrar las cenizas de miles de difuntos que deseaban descansar aquí y que quieren formar parte del arrecife artificial más grande del mundo, con unas dimensiones de dos mil toneladas de estructuras en un área de sesenta y cinco mil metros cuadrados.
El monumento para los difuntos, además de ser un parque para buzos o un refugio para corales y peces fue creado por el empresario Gary Levine y por el escultor Bert Kilbride, quien en 2003 pusieron en marcha esta idea tenebrosa. Hasta 2007 no pudo ser construido a pesar de que ya había muchas personas enterradas en él. Debido a ello muchas cenizas que habían sido vertidas antes de ser finalizado el proyecto se encuentran entremezcladas con el cemento, lo que hace aún mas curiosa su estructura.
Si alguien quiere descansar en este lugar deberá pagar entre 1.500 y 6.000 dólares, según el tipo de descanso eterno que deseen. Aquí se puede ver todo lo que un excéntrico desea a la hora de su muerte y que sea un amante del mar.