Más de un centenar de personas han asistido este domingo en absoluto silencio a la misa del niño de 6 años que el sábado falleció atropellado durante la Cabalgata de Reyes.
El accidente, según testigos presenciales, se produjo en la plaza General Torrijos cuando el pequeño intentaba coger caramelos arrojados por una de las primeras carrozas del cortejo y, según testigos presenciales, se metió debajo de las ruedas de la carroza a coger una golosina, aunque la cabalgata no se suspendió por motivos de seguridad.
El Ayuntamiento de Málaga ha declarado dos días de luto y las banderas ondean a media asta. Se han suspendido todos los actos públicos municipales durante estos dos días, entre ellos las cabalgatas organizadas en otros distritos municipales, previstas para este domingo.