Parece que todo se debió a un error de la Cruz Roja Mexicana, que aseguró a la familia que se había encontrado muerto a Rodolfo Becerra López, un hombre de 76 años,
que llevaba cinco días desaparecido. Se localizó el cuerpo de un hombre que cumplía con las características del desaparecido, llamó a los familiares para llevar a cabo el reconocimiento del cuerpo, quienes
de inmediato confirmaron la noticia, sin necesidad de recurrir a las pruebas de
ADN.
Tras la inesperada desaparición y la triste noticia, los familiares
organizaron su funeral en el Templo de la Asunción, sin embargo, para sorpresa
de todos, Becerra López llegó en taxi a su hogar, causando gran sorpresa entre
sus amigos y seres cercanos.
El anciano, quien padece demencia senil, relató que anduvo deambulando, durmiendo en la calle y parques, al olvidar
por un momento la información que lo podía llevar de regreso a su casa.
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