Los beneficios que aportan las frutas, nadie los pone en duda, y cada vez hay más estudios, que nos informan de los beneficios específicos de alguna de ellas.
Esta vez son las llamadas frutas del bosque, como fresas, arándanos, grosellas o cerezas, las que se han mostrado muy eficaces para mantener la agudeza mental y reducir la pérdida de memoria.
A partir de los 45 años, razonamiento y memoria empiezan a deteriorarse, y quienes comían mucha fruta del bosque tuvieron una pérdida de memoria más lenta.
El estudio –que se publica en la revista Annals of Neurology– implicó a más de 121.000 mujeres de entre 30 y 55 años. Desde 1976 y hasta 2011 se sometieron a varios cuestionarios para responder a preguntas sobre su salud y estilo de vida.
Los resultados mostraron que las mujeres que comían niveles altos de frutas del bosque, en particular fresas y arándanos azules, tuvieron una pérdida de memoria más lenta –un retraso de 2,5 años de media– en comparación con quienes no los comían.