El cadáver era colocado en la posición considerada como más apropiada para su enterramiento: las rodillas flexionadas delante del pecho y sobre éste los brazos cruzados. Cuando se trata de un propietario importante, es envuelto con una piel de de buey negra.
Antes de transportar el cadáver se realiza un interrogatorio necromántico sobre dos asuntos: la designación del culpable de su muerte y el nombramiento del heredero principal. Una autoridad familiar formula estas preguntas al difunto. Éste responde con el movimiento de la percha sobre la que está suspendido el cadáver y que reposa sobre las espaldas de los porteadores.Estas mismas preguntas son repetidas en el cementerio.Será enterrado más o menos cerca del corral del ganado vacuno que tenía un carácter sagrado para ellos
El duelo por un difunto dura un número de dias proporcional con su categoría social, así como el sacrifio de cabezas de ganado, cumpliendo diferentes rituales.
Después de la muerte de un hombre casado, propietario de una granja, las viudas continuaban viviendo en la misma casa durante algunos meses. La regla general establecía que ellas cultivaran los campos durante una estación. El producto de este trabajo se repartía entre ellas y el heredero principal del difunto. Terminada la cosecha, las viudas podían aceptar unas segundas nupcias, salvo en el caso en que ellas formaran parte de la herencia
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