Una canaria de 19 años, Cayetana Fermín, ha emprendido su negocio en Valencia, una funeraria con precios de coste y humanitaria para aquellos que lo necesiten.
La Funeraria Nuestra Señora de la Esperanza está ubicada en Mislata, Valencia y ya han organizado 20 entierros.
Cayetana realizó sus estudios de tanatopraxia y tanatoestética y con 18 años le surgió la idea de crear la funeraria.
Para considerar si la familia tiene recursos o no para aplicar rebajas solidarias en los funerales, Cayetana no tiene ninguna técnica ni documentos: «Basta sólo con mirar a los familiares a los ojos, con ver su desesperación, con analizar como visten o entrar en sus casas» dice.
Su familia, con experiencias funerarias, la ha apoyado y ahora sus padres trabajan junto con ella, su padre es el chófer del coche fúnebre, su madre lleva toda la parte administrativa y Cayetana se dedica a preparar los cuerpos sin vida, organizar los entierros y atender al público.
¿Por qué Valencia?
Según Cayetana, Mislata, reunía las condiciones más adecuadas: «En
la capital ya no quedan funerarias familiares, sólo en los pueblos.
Además, Valencia no tiene requisitos tan duros como otras ciudades. En
Madrid, si no tienes 10 coches fúnebres no puedes abrir un negocio» explica.