Envejecer es parte de la naturaleza humana, pero si queremos combatir la degeneración y muerte que provocan los radicales libres en las células debemos cuidarnos por dentro.
En esta ocasión lo sano no está reñido con lo sabroso y podemos encontrar esta fuente de juventud sobre todo en el chocolate negro, las alubias y los frutos secos, especialmente en las nueces.
En una dieta equilibrada, el consumo de alimentos ricos en polifenoles, los antioxidantes más populares, puede ayudar a proteger de ciertas enfermedades crónicas relacionadas con la edad, gracias a su capacidad para controlar los radicales libres.
Artículos relacionados