Elegía a las víctimas
Yo quiero abrazar los corazones,
para que cuando lloren, no se detegan
ni se les mueran en este silencio el recuerdo,
que a la vida asoma.
Besar las frentes marchitas,
de los que han perdido a sus seres
queridos y estar con ellos,
cada día de sus vidas.
No dejaré ni un momento
en abrazarlos, que son tantas
cosas que han perdido,
que cuando suspiran, hasta
el aliento les duelen.
Seré el árbol, que cobijo
y sombra da, para que cuando
la necesiten, no tenga más que arrimarse
y puedan contemplar ese cielo,
tan alto y tan lejano, mientras les voy
contando las estrellas y cuanto los quiero,
y que mi querer, va mucho más allá del infinito universo.
No dejaré que la tristeza arrebate
la esperanza de vida que queda,
pues en cada momento, las circunstancias
imponen, dejando una huella
en el alma y en el corazón.
Javier Juárez J.J.
07-06-2017