Array ( [Obituary] => Array ( [id] => 679071 [company_id] => 6596 [prefix] => La señora Doña [name] => Claudina García Díaz [what] => D.E.P. [age] => 75 [body] => el día 30 de Abril de 2014 VELATORIO: Tanatorio La Auxiliadora en Santa María de Guía. FUNERAL: El JUEVES día 1 de Mayo a las DOCE de la mañana en la iglesia de Santa María de Guía. Seguidamente recibirá sepultura en el cementerio La Atalaya en la misma localidad. [contribution] => [source] => [funeral] => [date] => 2014-04-30 [slug] => claudina_garcia_diaz [hits] => 0 [signed] => 1 [condolence_count] => 19 [filename] => [created] => 2014-04-30 03:30:12 [modified] => 2014-04-30 14:50:29 [redirect] => 0 [redirect_status] => [redirect_url] => [show_tribute] => 0 [tribute_url] => [incomplete] => 0 [visible] => 1 [company_visible] => 1 [erased] => 0 [erase_date] => [company_parent_id] => 0 [location_id] => 786844 [location_path] => 63, 34265, 40371 [location_place_id] => 40371 [location_place_name] => Guía [location_place_slug] => guia [location_place_level] => 3 [location_place_visible] => 1 [location_place_parent_id] => 34265 [publishing_places_place_id] => 0 [publishing_places_place_name] => [publishing_places_place_slug] => [publishing_places_place_level] => [publishing_places_place_visible] => [publishing_places_place_parent_id] => [company_name] => Preventiva Seguros [company_slug] => preventiva_seguros [NIF] => [certification] => [theme] => 1 [obituary_theme] => 1 [place_id] => España → Las Palmas → Guía [where] => Guía ) [Company] => Array ( [id] => 6596 [name] => Preventiva Seguros [address] => Calle Arminza, 2 [zip] => 28023 [town] => Madrid [area] => [province] => Madrid [phone] => 902304060 [phone2] => [flowers_phone_extension] => [fax] => [email] => [email protected] [web] => http://www.preventiva.com/ [slug] => preventiva_seguros [legal_name] => Grupo Preventiva Seguros [legal_id] => [tax_id] => [billing_account] => [obituary_count] => 21040 [created] => 2009-12-13 16:59:52 [modified] => 2016-01-18 14:14:10 [flower_service_method] => 1 [has_flower_service] => 1 [flower_service_url] => http://clk.tradedoubler.com/click?p(239341)a(2487985)g(21337436)url(http://www.floraqueen.es/coronas-funeral) [obituary_incomplete_default_value] => 1 [obituary_signed_default_value] => 1 [alert_on_new_obituary_created] => 0 [visible] => 1 [is_premium] => 0 [premium_is_active] => 0 [show_premium_preview] => 0 [featured] => 1 [has_remotecontent_service] => 0 [ignore_remotecontent_company_filter] => 0 [send_monthly_report] => 1 [redirect] => 0 [redirect_status] => 0 [redirect_url] => [latitude] => 40.4691 [longitude] => -3.80299 [parent_id] => 0 [activity_id] => 2 [itemsperpage] => 0 [container_width] => [container_posx] => [container_posy] => [fontsize] => [fontfamily] => [fontcolor] => [bgcolorheader] => [bgcoloreven] => [bgcoloruneven] => [fontcolorheader] => [authorized_domain] => [remote_content_date_limit] => [has_funeral_service_budget] => 1 [service_budget_priority] => [service_budget_extension] => ) [Location] => Array ( [id] => 786844 [class] => Obituary [foreign_id] => 679071 [name] => Guía [place_id] => 40371 [path] => 63, 34265, 40371 [Place] => Array ( [id] => 40371 [name] => Guía [slug] => guia [latitude] => -15.6328401566 [longitude] => 28.1391506195 [exact] => 1 [level] => 3 [visible] => 1 [parent_id] => 34265 [lft] => 81363 [rght] => 81364 ) ) [CustomTribute] => Array ( [id] => [obituary_id] => [user_id] => [born_place_id] => [die_place_id] => [name] => [prefix] => [age] => [body] => [gratitude_message] => [source] => [slug] => [created] => [modified] => [expiration_date] => [filename] => [born] => [died] => [what] => [visible] => [paid] => [confirmed_by_user] => [show_born] => [show_died] => [user_validation_required] => [allow_users_contact] => [theme] => [type] => [admin_relation] => ) [Condolence] => Array ( [0] => Array ( [id] => 188050 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 103886 [body] => Reciban su familia y amigos mis más sentidas condolencias por el fallecimiento de la Sra. Claudina García. Aunque no la conocí, realmente parte el corazón ésta dolorosa realidad, la muerte. Sin Embargo, la Biblia dice que 'va a haber resurrección' y describe la condición futura de la humanidad en la Tierra, diciendo que Dios 'limpiará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no será más' (Hechos 24:15) (Revelación 21:4). Que Dios los ampare y consuele! Sinceramente [name] => Rosa Z. Hernandez [ip] => 66.87.149.217 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-04-30 05:21:50 [modified] => 2014-04-30 05:21:50 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [1] => Array ( [id] => 188341 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Estoy pensando en todas las personas que han perdido a un ser querido por eso le estoy enviando estas líneas que son con la mejor intención para que tenga la esperanza ¡La muerte no es el fin! esa fue la promesa que hizo nuestro señor Jesucristo cuando estuvo en la tierra y por eso yo le escribo estas líneas. para decirle que lamentó mucho lo que le está pasando pero tenemos esa esperanza y también promesa que se realizará , por favor lea estas líneas y si puede en las escrituras que usted tenga lea estas citas y estas palabras lo consolarán empiese con la muerte de Lázaro ese fue un milagro efectuado por nuestro señor Jesucristo. Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Es curioso que en ambos casos Jesús dijo que el difunto estaba durmiendo, y la comparación es muy apropiada. ¿Por qué? Porque el sueño es un estado de inconsciencia que transmite muy bien la idea de descansar del dolor y el sufrimiento. Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. sí usted desea más información puede conectarse en jw.org/es [name] => Fernando toledo [ip] => 64.134.128.158 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-04-30 20:31:53 [modified] => 2014-04-30 20:31:53 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [2] => Array ( [id] => 188598 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Estoy pensando en todas las personas que han perdido a un ser querido por eso le estoy enviando estas líneas que son con la mejor intención para que tenga la esperanza ¡La muerte no es el fin! esa fue la promesa que hizo nuestro señor Jesucristo cuando estuvo en la tierra y por eso yo le escribo estas líneas. para decirle que lamentó mucho lo que le está pasando pero tenemos esa esperanza y también promesa que se realizará , por favor lea estas líneas y si puede en las escrituras que usted tenga lea estas citas y estas palabras lo consolarán empiese con la muerte de Lázaro ese fue un milagro efectuado por nuestro señor Jesucristo. Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Es curioso que en ambos casos Jesús dijo que el difunto estaba durmiendo, y la comparación es muy apropiada. ¿Por qué? Porque el sueño es un estado de inconsciencia que transmite muy bien la idea de descansar del dolor y el sufrimiento. Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. sí usted desea más información puede conectarse en jw.org/es [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-01 17:35:44 [modified] => 2014-05-01 17:35:44 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [3] => Array ( [id] => 189161 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 84435 [body] => Querida familia: En este momento tan dificil, tengan la seguridad de que nuestro Padre celestial, Jehova, siente su gran dolor y les dara las fuerzas necesarias para que puedan seguir adelante. A mi me ha ayudado mucho la siguiente pagina web, espero que tambien sea su caso: www.jw.org/es [name] => Lissa [ip] => 189.242.70.73 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-02 18:33:33 [modified] => 2014-05-02 18:33:33 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [4] => Array ( [id] => 189475 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 102908 [body] => Deseo expresar mis mas sinceras condolencias a la familia de la señora, claudina García Días. Espero que estos textos les sirvan de consuelo. Es verdad que por el momento no hay palabras que puedan Remediar, la pérdida de un ser querido.pero, espero que estas palabras de Jesús, les animen. En (juan 5:28, 29) Jesús prometió que él levantará a nuestros seres queridos para que vuelvan a la vida, pero será para que vivan aquí en la tierra en un hermoso paraíso. Esto lo dijo Jesús en ( Lucas 23:43) y ( Mateo 5:5 ) esto nos enseña que es posible volver a mirar a nuestros seres queridos de nuevo. [name] => Filemón [ip] => 66.87.70.180 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-04 01:31:44 [modified] => 2014-05-04 01:31:44 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [5] => Array ( [id] => 189958 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => ¡La muerte no es el fin! esa fue la promesa que hizo nuestro señor Jesucristo cuando estuvo en la tierra y por eso yo le escribo estas líneas. para decirle que lamentó mucho lo que le está pasando pero tenemos esa esperanza y también promesa que se realizará por favor lea estas líneas y si puede en las escrituras que usted tenga lea estas citas y estas palabras lo consolarán empiese con la muerte de Lázaro ese fue un milagro efectuado por nuestro señor Jesucristo. Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Es curioso que en ambos casos Jesús dijo que el difunto estaba durmiendo, y la comparación es muy apropiada. ¿Por qué? Porque el sueño es un estado de inconsciencia que transmite muy bien la idea de descansar del dolor y el sufrimiento (Eclesiastés 9:5; vea el recuadro “La muerte es como un sueño profundo”). Los primeros discípulos de Jesús comprendían muy bien el verdadero estado de los muertos. “Para [ellos], la muerte no era más que un sueño, y la tumba, un lugar de descanso [...] para quienes habían muerto fieles”, señala la Encyclopedia of Religion and Ethics.* Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. “SI UN HOMBRE [...] MUERE, ¿PUEDE VOLVER A VIVIR?” Aunque a todos nos agrada tener una buena noche de descanso, ¿quién querría dormir para siempre? ¿Hay esperanza de que los muertos que duermen en sus tumbas vuelvan a vivir tal como Lázaro y la hija de Jairo? El patriarca Job hizo la siguiente pregunta cuando se sintió cerca de la muerte: “Si un hombre [...] muere, ¿puede volver a vivir?” (Job 14:14). Dirigiéndose al Todopoderoso, Job respondió su propia pregunta: “Tú me llamarás, y yo te responderé; desearás ver la obra de tus manos” (Job 14:15, Nueva Versión Internacional). Este hombre fiel estaba seguro de que Jehová deseaba traerlo de vuelta a la vida. ¿Se estaría engañando? No, en absoluto. Las resurrecciones realizadas por Jesús son prueba clara de que Dios le ha dado poder sobre la muerte. De hecho, la Biblia afirma que Jesús tiene en la mano “las llaves de la muerte” (Revelación 1:18). Con ellas abrirá las puertas del sepulcro, tal como ordenó que se removiera la roca que cerraba la tumba de Lázaro. La Biblia menciona vez tras vez la promesa de la resurrección. Por ejemplo, un ángel le aseguró al profeta Daniel: “Descansarás, pero te pondrás de pie para tu porción al fin de los días” (Daniel 12:13). Jesús les dijo lo siguiente a los saduceos, líderes religiosos que no creían en la resurrección: “Están equivocados, porque no conocen ni las Escrituras ni el poder de Dios” (Mateo 22:23, 29). Y el apóstol Pablo afirmó: “Tengo esperanza en cuanto a Dios [...] de que va a haber resurrección así de justos como de injustos” (Hechos 24:15). ¿CUÁNDO DESPERTARÁN LOS MUERTOS? ¿Cuándo tendrá lugar esta resurrección de justos y de injustos? “Al fin de los días”, como le dijo el ángel a Daniel. Eso es lo que creía Marta: que su hermano se levantaría “en el último día” (Juan 11:24). La Biblia relaciona este “último día” con el reinado de Jesús. Pablo escribió: “[Cristo] tiene que reinar hasta que Dios haya puesto a todos los enemigos debajo de sus pies. Como el último enemigo, la muerte ha de ser reducida a nada” (1 Corintios 15:25, 26). Esta es una poderosa razón para pedirle a Dios que venga su Reino y se haga su voluntad en la Tierra.* Como bien sabía Job, Dios quiere resucitar a los muertos. Cuando llegue ese día, la muerte realmente desaparecerá, y nunca, nunca nadie más tendrá que preguntarse: “¿Acaba todo al morir?”. De hecho, la palabra cementerio proviene de una palabra griega que significa “lugar de descanso”. La muerte es como un sueño profundo “Haz brillar mis ojos, sí, para que no me duerma en la muerte.” (Salmo 13:3.) “‘Nuestro amigo Lázaro está descansando, pero yo me voy allá para despertarlo del sueño’. Por lo tanto los discípulos le dijeron: ‘Señor, si está descansando, recobrará la salud’. Sin embargo, Jesús había hablado de la muerte de aquel.” (Juan 11:11-13.) “David, por una parte, sirvió según la voluntad expresa de Dios en su propia generación, y se durmió en la muerte.” (Hechos 13:36.) “Cristo ha sido levantado de entre los muertos, las primicias de los que se han dormido en la muerte.” (1 Corintios 15:20.) “No queremos que estén en ignorancia respecto a los que están durmiendo en la muerte; para que no se apesadumbren ustedes como lo hacen también los demás que no tienen esperanza.” (1 Tesalonicenses 4:13.) [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-05 23:24:19 [modified] => 2014-05-05 23:24:19 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [6] => Array ( [id] => 191032 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => ¡La muerte no es el fin! esa fue la promesa que hizo nuestro señor Jesucristo cuando estuvo en la tierra y por eso yo le escribo estas líneas. para decirle que lamentó mucho lo que le está pasando pero tenemos esa esperanza y también promesa que se realizará por favor lea estas líneas y si puede en las escrituras que usted tenga lea estas citas y estas palabras lo consolarán empiese con la muerte de Lázaro ese fue un milagro efectuado por nuestro señor Jesucristo. Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Es curioso que en ambos casos Jesús dijo que el difunto estaba durmiendo, y la comparación es muy apropiada. ¿Por qué? Porque el sueño es un estado de inconsciencia que transmite muy bien la idea de descansar del dolor y el sufrimiento (Eclesiastés 9:5; vea el recuadro “La muerte es como un sueño profundo”). Los primeros discípulos de Jesús comprendían muy bien el verdadero estado de los muertos. “Para [ellos], la muerte no era más que un sueño, y la tumba, un lugar de descanso [...] para quienes habían muerto fieles”, señala la Encyclopedia of Religion and Ethics.* Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. “SI UN HOMBRE [...] MUERE, ¿PUEDE VOLVER A VIVIR?” Aunque a todos nos agrada tener una buena noche de descanso, ¿quién querría dormir para siempre? ¿Hay esperanza de que los muertos que duermen en sus tumbas vuelvan a vivir tal como Lázaro y la hija de Jairo? El patriarca Job hizo la siguiente pregunta cuando se sintió cerca de la muerte: “Si un hombre [...] muere, ¿puede volver a vivir?” (Job 14:14). Dirigiéndose al Todopoderoso, Job respondió su propia pregunta: “Tú me llamarás, y yo te responderé; desearás ver la obra de tus manos” (Job 14:15, Nueva Versión Internacional). Este hombre fiel estaba seguro de que Jehová deseaba traerlo de vuelta a la vida. ¿Se estaría engañando? No, en absoluto. Las resurrecciones realizadas por Jesús son prueba clara de que Dios le ha dado poder sobre la muerte. De hecho, la Biblia afirma que Jesús tiene en la mano “las llaves de la muerte” (Revelación 1:18). Con ellas abrirá las puertas del sepulcro, tal como ordenó que se removiera la roca que cerraba la tumba de Lázaro. La Biblia menciona vez tras vez la promesa de la resurrección. Por ejemplo, un ángel le aseguró al profeta Daniel: “Descansarás, pero te pondrás de pie para tu porción al fin de los días” (Daniel 12:13). Jesús les dijo lo siguiente a los saduceos, líderes religiosos que no creían en la resurrección: “Están equivocados, porque no conocen ni las Escrituras ni el poder de Dios” (Mateo 22:23, 29). Y el apóstol Pablo afirmó: “Tengo esperanza en cuanto a Dios [...] de que va a haber resurrección así de justos como de injustos” (Hechos 24:15). ¿CUÁNDO DESPERTARÁN LOS MUERTOS? ¿Cuándo tendrá lugar esta resurrección de justos y de injustos? “Al fin de los días”, como le dijo el ángel a Daniel. Eso es lo que creía Marta: que su hermano se levantaría “en el último día” (Juan 11:24). La Biblia relaciona este “último día” con el reinado de Jesús. Pablo escribió: “[Cristo] tiene que reinar hasta que Dios haya puesto a todos los enemigos debajo de sus pies. Como el último enemigo, la muerte ha de ser reducida a nada” (1 Corintios 15:25, 26). Esta es una poderosa razón para pedirle a Dios que venga su Reino y se haga su voluntad en la Tierra.* Como bien sabía Job, Dios quiere resucitar a los muertos. Cuando llegue ese día, la muerte realmente desaparecerá, y nunca, nunca nadie más tendrá que preguntarse: “¿Acaba todo al morir?”. De hecho, la palabra cementerio proviene de una palabra griega que significa “lugar de descanso”. La muerte es como un sueño profundo “Haz brillar mis ojos, sí, para que no me duerma en la muerte.” (Salmo 13:3.) “‘Nuestro amigo Lázaro está descansando, pero yo me voy allá para despertarlo del sueño’. Por lo tanto los discípulos le dijeron: ‘Señor, si está descansando, recobrará la salud’. Sin embargo, Jesús había hablado de la muerte de aquel.” (Juan 11:11-13.) “David, por una parte, sirvió según la voluntad expresa de Dios en su propia generación, y se durmió en la muerte.” (Hechos 13:36.) “Cristo ha sido levantado de entre los muertos, las primicias de los que se han dormido en la muerte.” (1 Corintios 15:20.) “No queremos que estén en ignorancia respecto a los que están durmiendo en la muerte; para que no se apesadumbren ustedes como lo hacen también los demás que no tienen esperanza.” (1 Tesalonicenses 4:13.) [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-09 00:34:51 [modified] => 2014-05-09 00:34:51 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [7] => Array ( [id] => 193258 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Todos Hemos perdido un ser querido por ejemplo ya perdí a mis papas y aunque ha pasado mucho tiempo todavía los recuerdo por que ese sentimiento de esa pérdida no se borra pero estas palabras que le estoy enviando me ayudaron a mi por lea estas. Cuando nuestro señor Jesucristo estuvo en la tierra prometió la vida eterna, pero tenemos esa esperanza y también promesa que se realizará. lo que prometió nuestro señor Jesucristo que dio su vida por toda la humanidad, por favor lea estas líneas,y si puede en la Biblia que usted tenga lea estos textos y estas palabras lo consolarán lo que sigue es parte del relato de Lázaro y así empieza Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Es curioso que en ambos casos Jesús dijo que el difunto estaba durmiendo, y la comparación es muy apropiada. ¿Por qué? Porque el sueño es un estado de inconsciencia que transmite muy bien la idea de descansar del dolor y el sufrimiento Los primeros discípulos de Jesús comprendían muy bien el verdadero estado de los muertos. “Para [ellos], la muerte no era más que un sueño, y la tumba, un lugar . Aunque a todos nos agrada tener una buena noche de descanso, ¿quién querría dormir para siempre? ¿Hay esperanza de que los muertos que duermen en sus tumbas vuelvan a vivir tal como Lázaro y la hija de Jairo? El patriarca Job hizo la siguiente pregunta cuando se sintió cerca de la muerte: “Si un hombre [...] muere, ¿puede volver a vivir?” (Job 14:14). Dirigiéndose al Todopoderoso, Job respondió su propia pregunta: “Tú me llamarás, y yo te responderé; desearás ver la obra de tus manos” (Job 14:15, Nueva Versión Internacional). Este hombre fiel estaba seguro de que Jehová deseaba traerlo de vuelta a la vida. ¿Se estaría engañando? No, en absoluto. Las resurrecciones realizadas por Jesús son prueba clara de que Dios le ha dado poder sobre la muerte. De hecho, la Biblia afirma que Jesús tiene en la mano “las llaves de la muerte” (Revelación 1:18). Con ellas abrirá las puertas del sepulcro, tal como ordenó que se removiera la roca que cerraba la tumba de Lázaro. La Biblia menciona vez tras vez la promesa de la resurrección. Por ejemplo, un ángel le asegmuró al profeta Daniel: “Descansarás, pero te pondrás de pie para tu porción al fin de los días” (Daniel 12:13). Jesús les dijo lo siguiente a los saduceos, líderes religiosos que no creían en la resurrección: “Están equivocados, porque no conocen ni las Escrituras ni el poder del Dios” (Mateo 22:23, 29). Y el apóstol Pablo afirmó: “Tengo esperanza en cuanto a Dios [...] de que va a haber resurrección así de justos como de injustos” (Hechos 24:15). ¿CUÁNDO DESPERTARÁN LOS MUERTOS? ¿Cuándo tendrá lugar esta resurrección de justos y de injustos? “Al fin de los días”, como le dijo el ángel a Daniel. Eso es lo que creía Marta: que su hermano se levantaría “en el último día” (Juan 11:24). La Biblia relaciona este “último día” con el reinado de Jesús. Pablo escribió: “[Cristo] tiene que reinar hasta que Dios haya puesto a todos los enemigos debajo de sus pies. Como el último enemigo, la muerte ha de ser reducida a nada” (1 Corintios 15:25, 26). Esta es una poderosa razón para pedirle a Dios que venga su Reino y se haga la voluntad de Dios en la Tierra.Como bien sabía Job, Dios quiere resucitar a los muertos. Cuando llegue ese día, la muerte realmente desaparecerá. espero que le ayuden estas palabras [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-15 17:40:23 [modified] => 2014-05-15 17:40:23 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [8] => Array ( [id] => 195689 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Todos Hemos perdido un ser querido por ejemplo ya perdí a mis papas y aunque ha pasado mucho tiempo todavía los recuerdo por que ese sentimiento de esa pérdida no se borra pero estas palabras que le estoy enviando me ayudaron a mi por lea estas. Cuando nuestro señor Jesucristo estuvo en la tierra prometió la vida eterna, pero tenemos esa esperanza y también promesa que se realizará. lo que prometió nuestro señor Jesucristo que dio su vida por toda la humanidad, por favor lea estas líneas,y si puede en la Biblia que usted tenga lea estos textos y estas palabras lo consolarán lo que sigue es parte del relato de Lázaro y así empieza Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Es curioso que en ambos casos Jesús dijo que el difunto estaba durmiendo, y la comparación es muy apropiada. ¿Por qué? Porque el sueño es un estado de inconsciencia que transmite muy bien la idea de descansar del dolor y el sufrimiento Los primeros discípulos de Jesús comprendían muy bien el verdadero estado de los muertos. “Para [ellos], la muerte no era más que un sueño, y la tumba, un lugar . Aunque a todos nos agrada tener una buena noche de descanso, ¿quién querría dormir para siempre? ¿Hay esperanza de que los muertos que duermen en sus tumbas vuelvan a vivir tal como Lázaro y la hija de Jairo? El patriarca Job hizo la siguiente pregunta cuando se sintió cerca de la muerte: “Si un hombre [...] muere, ¿puede volver a vivir?” (Job 14:14). Dirigiéndose al Todopoderoso, Job respondió su propia pregunta: “Tú me llamarás, y yo te responderé; desearás ver la obra de tus manos” (Job 14:15, Nueva Versión Internacional). Este hombre fiel estaba seguro de que Jehová deseaba traerlo de vuelta a la vida. ¿Se estaría engañando? No, en absoluto. Las resurrecciones realizadas por Jesús son prueba clara de que Dios le ha dado poder sobre la muerte. De hecho, la Biblia afirma que Jesús tiene en la mano “las llaves de la muerte” (Revelación 1:18). Con ellas abrirá las puertas del sepulcro, tal como ordenó que se removiera la roca que cerraba la tumba de Lázaro. La Biblia menciona vez tras vez la promesa de la resurrección. Por ejemplo, un ángel le asegmuró al profeta Daniel: “Descansarás, pero te pondrás de pie para tu porción al fin de los días” (Daniel 12:13). Jesús les dijo lo siguiente a los saduceos, líderes religiosos que no creían en la resurrección: “Están equivocados, porque no conocen ni las Escrituras ni el poder del Dios” (Mateo 22:23, 29). Y el apóstol Pablo afirmó: “Tengo esperanza en cuanto a Dios [...] de que va a haber resurrección así de justos como de injustos” (Hechos 24:15). ¿CUÁNDO DESPERTARÁN LOS MUERTOS? ¿Cuándo tendrá lugar esta resurrección de justos y de injustos? “Al fin de los días”, como le dijo el ángel a Daniel. Eso es lo que creía Marta: que su hermano se levantaría “en el último día” (Juan 11:24). La Biblia relaciona este “último día” con el reinado de Jesús. Pablo escribió: “[Cristo] tiene que reinar hasta que Dios haya puesto a todos los enemigos debajo de sus pies. Como el último enemigo, la muerte ha de ser reducida a nada” (1 Corintios 15:25, 26). Esta es una poderosa razón para pedirle a Dios que venga su Reino y se haga la voluntad de Dios en la Tierra.Como bien sabía Job, Dios quiere resucitar a los muertos. Cuando llegue ese día, la muerte realmente desaparecerá. espero que le ayuden estas palabras [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-05-23 16:59:16 [modified] => 2014-05-23 16:59:16 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [9] => Array ( [id] => 198377 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Nos enteramos del fallecimiento de su familiar, mi esposa y yo le escribimos estas líneas. Como parte de mi más sentido pésame, todos atravesamos por ese dolor de perder un ser querido yo pase por ese dolor y estas palabras que dejo registradas Jesús en la sagradas escrituras me ayudaron y también pueden ayudarlo a sobre llevar su dolor Jesucristo dijo: “No se maravillen de esto, porque viene la hora en que todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán”. (Juan 5:28, 29; Hechos 24:15.) Poco después de decir esto Jesús vio una procesión funeraria que salía de la ciudad israelita de Naín. El joven que había muerto era el hijo único de una viuda. Al contemplar su gran pesar, Jesús se enterneció; y dirigiéndose al cuerpo sin vida, le ordenó: “Joven, yo te digo: ¡Levántate!”. Y el joven se incorporó y Jesús se lo dio a su madre. (Lucas 7:11-17.)por favor lea esta promesa Al igual que en el caso de esa viuda, también hubo un gran éxtasis cuando Jesús estuvo en el hogar de Jairo, el presidente de la sinagoga judía. Su hija de doce años había muerto. Al llegar Jesús a la casa de Jairo, se dirigió a donde estaba la niña muerta y le dijo: “Muchacha, ¡levántate!”. ¡Y se levantó! (Lucas 8:40-56.) Posteriormente murió Lázaro, un amigo de Jesús. Cuando Jesús llegó a su casa, hacía cuatro días que Lázaro había muerto. Aunque estaba muy apesadumbrada, su hermana Marta expresó su esperanza diciendo: “Yo sé que se levantará en la resurrección en el último día”. Pero Jesús fue a la tumba, ordenó que quitaran la piedra y clamó: “¡Lázaro, sal!”. ¡Y salió! (Juan 11:11-44.) Es cierto que esos milagros de Jesús sólo tuvieron un beneficio temporal, ya que las personas a quienes resucitó volvieron a morir. Sin embargo, él probó hace mas de 2000 años que, con el poder de Dios, ¡los muertos verdaderamente pueden volver a vivir! De modo que mediante sus milagros Jesús demostró en pequeña escala lo que sucederá en la Tierra bajo el Reino de Dios. Cuando se haga la voluntad de Dios aquí en la tierra como dice Mateo 6:9,10 “Ustedes, pues, tienen que orar de esta manera: ” ‘Padre nuestro [que estás] en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como en el cielo, también sobre la tierra. Si usted desea más información puede buscar en www.jw.org/ [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-06-01 19:26:46 [modified] => 2014-06-01 19:26:46 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [10] => Array ( [id] => 199152 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Nos enteramos del fallecimiento de su familiar, mi esposa y yo le escribimos estas líneas. Como parte de mi más sentido pésame, todos atravesamos por ese dolor de perder un ser querido yo pase por ese dolor y estas palabras que dejo registradas Jesús en la sagradas escrituras me ayudaron y también pueden ayudarlo a sobre llevar su dolor Jesucristo dijo: “No se maravillen de esto, porque viene la hora en que todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán”. (Juan 5:28, 29; Hechos 24:15.) Poco después de decir esto Jesús vio una procesión funeraria que salía de la ciudad israelita de Naín. El joven que había muerto era el hijo único de una viuda. Al contemplar su gran pesar, Jesús se enterneció; y dirigiéndose al cuerpo sin vida, le ordenó: “Joven, yo te digo: ¡Levántate!”. Y el joven se incorporó y Jesús se lo dio a su madre. (Lucas 7:11-17.)por favor lea esta promesa Al igual que en el caso de esa viuda, también hubo un gran éxtasis cuando Jesús estuvo en el hogar de Jairo, el presidente de la sinagoga judía. Su hija de doce años había muerto. Al llegar Jesús a la casa de Jairo, se dirigió a donde estaba la niña muerta y le dijo: “Muchacha, ¡levántate!”. ¡Y se levantó! (Lucas 8:40-56.) Posteriormente murió Lázaro, un amigo de Jesús. Cuando Jesús llegó a su casa, hacía cuatro días que Lázaro había muerto. Aunque estaba muy apesadumbrada, su hermana Marta expresó su esperanza diciendo: “Yo sé que se levantará en la resurrección en el último día”. Pero Jesús fue a la tumba, ordenó que quitaran la piedra y clamó: “¡Lázaro, sal!”. ¡Y salió! (Juan 11:11-44.) Es cierto que esos milagros de Jesús sólo tuvieron un beneficio temporal, ya que las personas a quienes resucitó volvieron a morir. Sin embargo, él probó hace mas de 2000 años que, con el poder de Dios, ¡los muertos verdaderamente pueden volver a vivir! De modo que mediante sus milagros Jesús demostró en pequeña escala lo que sucederá en la Tierra bajo el Reino de Dios. Cuando se haga la voluntad de Dios aquí en la tierra como dice Mateo 6:9,10 “Ustedes, pues, tienen que orar de esta manera: ” ‘Padre nuestro [que estás] en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como en el cielo, también sobre la tierra. Si usted desea más información puede buscar en www.jw.org/ [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-06-03 20:13:41 [modified] => 2014-06-03 20:13:41 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [11] => Array ( [id] => 201893 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 104536 [body] => Estoy escribiendo esta condolencia para darle mi más sentido pésame y sé que usted y su familia están pasando por el dolor de perder un ser querido, pero tenemos la esperanza de volverlos a ver. Porque esa es la promesa que tenemos de parte de Dios por eso le escribo las siguientes palabras y textos, que se encuentran en las sagradas escrituras por favor lea estas palabras para que Ud. Vea esa promesa empezando con la resurrección de lázaro ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => Fernando toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-06-11 21:13:57 [modified] => 2014-06-11 21:13:57 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [12] => Array ( [id] => 204005 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => Estoy escribiendo esta condolencia para darle mi más sentido pésame y sé que usted y su familia están pasando por el dolor de perder un ser querido, pero tenemos la esperanza de volverlos a ver. Porque esa es la promesa que tenemos de parte de Dios por eso le escribo las siguientes palabras y textos, que se encuentran en las sagradas escrituras por favor lea estas palabras para que Ud. Vea esa promesa empezando con la resurrección de lázaro ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => olga m toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-06-17 01:44:08 [modified] => 2014-06-17 01:44:08 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [13] => Array ( [id] => 206042 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => Estoy escribiendo esta condolencia para darle mi más sentido pésame y sé que usted y su familia están pasando por el dolor de perder un ser querido, pero tenemos la esperanza de volverlos a ver. Porque esa es la promesa que tenemos de parte de Dios por eso le escribo las siguientes palabras y textos, que se encuentran en las sagradas escrituras por favor lea estas palabras para que Ud. Vea esa promesa empezando con la resurrección de lázaro ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => olga m toledo [ip] => 209.216.166.241 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-06-22 19:48:54 [modified] => 2014-06-22 19:48:54 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [14] => Array ( [id] => 206121 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => Estoy escribiendo esta condolencia para darle mi más sentido pésame y sé que usted y su familia están pasando por el dolor de perder un ser querido, pero tenemos la esperanza de volverlos a ver. Porque esa es la promesa que tenemos de parte de Dios por eso le escribo las siguientes palabras y textos, que se encuentran en las sagradas escrituras por favor lea estas palabras para que Ud. Vea esa promesa empezando con la resurrección de lázaro ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => olga m toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-06-22 21:29:10 [modified] => 2014-06-22 21:29:10 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [15] => Array ( [id] => 210608 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => Estoy escribiendo esta condolencia para darle mi más sentido pésame y sé que usted y su familia están pasando por el dolor de perder un ser querido, pero tenemos la esperanza de volverlos a ver. Porque esa es la promesa que tenemos de parte de Dios por eso le escribo las siguientes palabras y textos, que se encuentran en las sagradas escrituras por favor lea estas palabras para que Ud. Vea esa promesa empezando con la resurrección de lázaro ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => olga m toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-07-05 16:59:05 [modified] => 2014-07-05 16:59:05 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [16] => Array ( [id] => 210698 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => Estoy escribiendo esta condolencia para darle mi más sentido pésame y sé que usted y su familia están pasando por el dolor de perder un ser querido, pero tenemos la esperanza de volverlos a ver. Porque esa es la promesa que tenemos de parte de Dios por eso le escribo las siguientes palabras y textos, que se encuentran en las sagradas escrituras por favor lea estas palabras para que Ud. Vea esa promesa empezando con la resurrección de lázaro ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => olga m toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-07-06 01:23:02 [modified] => 2014-07-06 01:23:02 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [17] => Array ( [id] => 212982 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => Nos enteramos del fallecimiento de su familiar, mi esposa y yo le escribimos estas líneas. Como parte de mi más sentido pésame, todos atravesamos por ese dolor de perder un ser querido yo pase por ese dolor y estas palabras que dejo registradas Jesús en la sagradas escrituras me ayudaron y también pueden ayudarlo a sobre llevar su dolor Jesucristo dijo: “No se maravillen de esto, porque viene la hora en que todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán”. (Juan 5:28, 29; Hechos 24:15.) Poco después de decir esto Jesús vio una procesión funeraria que salía de la ciudad israelita de Naín. El joven que había muerto era el hijo único de una viuda. Al contemplar su gran pesar, Jesús se enterneció; y dirigiéndose al cuerpo sin vida, le ordenó: “Joven, yo te digo: ¡Levántate!”. Y el joven se incorporó y Jesús se lo dio a su madre. (Lucas 7:11-17.)por favor lea esta promesa Al igual que en el caso de esa viuda, también hubo un gran éxtasis cuando Jesús estuvo en el hogar de Jairo, el presidente de la sinagoga judía. Su hija de doce años había muerto. Al llegar Jesús a la casa de Jairo, se dirigió a donde estaba la niña muerta y le dijo: “Muchacha, ¡levántate!”. ¡Y se levantó! (Lucas 8:40-56.) Posteriormente murió Lázaro, un amigo de Jesús. Cuando Jesús llegó a su casa, hacía cuatro días que Lázaro había muerto. Aunque estaba muy apesadumbrada, su hermana Marta expresó su esperanza diciendo: “Yo sé que se levantará en la resurrección en el último día”. Pero Jesús fue a la tumba, ordenó que quitaran la piedra y clamó: “¡Lázaro, sal!”. ¡Y salió! (Juan 11:11-44.) Es cierto que esos milagros de Jesús sólo tuvieron un beneficio temporal, ya que las personas a quienes resucitó volvieron a morir. Sin embargo, él probó hace mas de 2000 años que, con el poder de Dios, ¡los muertos verdaderamente pueden volver a vivir! De modo que mediante sus milagros Jesús demostró en pequeña escala lo que sucederá en la Tierra bajo el Reino de Dios. Cuando se haga la voluntad de Dios aquí en la tierra como dice Mateo 6:9,10 “Ustedes, pues, tienen que orar de esta manera: ” ‘Padre nuestro [que estás] en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como en el cielo, también sobre la tierra. Si usted desea más información puede buscar en www.jw.org/ [name] => olga m toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-07-13 16:51:15 [modified] => 2014-07-13 16:51:15 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) [18] => Array ( [id] => 223360 [obituary_id] => 679071 [user_id] => 112559 [body] => El motivo de este mensaje es expresarle mis más profundas condolencias por el reciente fallecimiento. De su familiar sabemos que es un gran dolor. Por eso queremos compartir con usted, la promesa de nuestro señor Jesucristo. Acerca de la resurrección y Le acompañamos en su sentimiento ante esta pérdida. Pero por favor lea en sus sagradas escrituras lo que dice respecto a la resurrección y piense en esto. ¡La muerte no es el fin! Betania era un pueblecito ubicado a tres kilómetros (dos millas) de Jerusalén (Juan 11:18). Allí tuvo lugar un hecho lamentable unas semanas antes de la muerte de Jesús. Lázaro, amigo íntimo del Maestro, enfermó repentinamente y falleció. Cuando Jesús se enteró de la noticia, les dijo a sus discípulos que Lázaro estaba dormido y que iba a ir a despertarlo (Juan 11:11). Pero al ver que no le habían entendido, les dijo directamente: “Lázaro ha muerto” (Juan 11:14). Cuatro días después del entierro, Jesús llegó a Betania y buscó a Marta, la hermana del difunto, para consolarla. “Si hubieras estado aquí mi hermano no habría muerto”, le dijo ella (Juan 11:17, 21). “Yo soy la resurrección y la vida —respondió Jesús—. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:25.) A fin de probar que no estaba prometiendo un imposible, Jesús se acercó a la tumba y gritó: “¡Lázaro, sal!” (Juan 11:43). Entonces, para el asombro de los presentes, Lázaro salió del sepulcro. Ya antes, Jesús había resucitado por lo menos a dos personas. Una de ellas fue la hija de Jairo, y también en esa ocasión dijo que la niña estaba dormida (Lucas 8:52). Nos consuela saber que los muertos no están sufriendo; están dormidos en su tumba. Vista así, la muerte pierde todo su misterio y no tiene ya por qué aterrorizarnos. Por eso es importante que tengamos fe en esa promesa Porque sabemos que eso no es un sueño todas esas promesas se cumplirán con certeza estas son unas pocas palabras que espero le ayuden a llevar su dolor. Si usted desea más información por favor visite el sitio www.jw.org/es [name] => olga m toledo [ip] => 71.95.101.91 [visible] => 0 [confirmed_by_user] => 1 [reviewed_by_admin] => 1 [informed_to_user] => 0 [created] => 2014-08-10 06:21:14 [modified] => 2014-08-10 06:21:14 [condolence_type] => 0 [is_free] => 0 ) ) )
La señora Doña Claudina García Díaz

Falleció el día 30-04-2014
en Guía a los 75 años


D.E.P.

el día 30 de Abril de 2014 VELATORIO: Tanatorio La Auxiliadora en Santa María de Guía. FUNERAL: El JUEVES día 1 de Mayo a las DOCE de la mañana en la iglesia de Santa María de Guía. Seguidamente recibirá sepultura en el cementerio La Atalaya en la misma localidad.

Preventiva Seguros

Preventiva Seguros

Esquelas-online-difuntos-fallecidos-rememori-flores a Claudina García Díaz
Esquelas-online-difuntos-fallecidos-rememori-velas a Claudina García Díaz

El equipo de Rememori.com quiere hacer llegar a su familia y allegados su sincero mensaje de condolencia, y ofrecerle todos los servicios que ofrece nuestra web, para recordar y homenajear a sus queridos fallecidos.

Rememori.com